Central Park, New York City

El Parque Central de Nueva York, o simplemente "Central Park" es considerado el gran pulmón de la isla de Manhattan. Construido en 1858, fue una revolución a la mirada de los espacios públicos. La idea de un parque en medio de una metrópolis fue súmamente radicalizante en aquel entonces.

El diseño de este parque muestra el control total que el humano quiere tener sobre la naturaleza. Con elementos orgánicos, se mantiene al parque en un estado inperfecto; manteniendo lo natural. Por lo que, en el parque, a pesar de no imitar en su totalidad a la naturaleza, se ve la misma idealizada.

Por consiguiente, la arquitectura paisajista es entonces disputada. Si lo natural es lo más bello, según la misma, por qué se interviene con la obra humana? Por qué no se deja simplemente ser?

Todos los humanos llegan a a manipular la naturaleza a su gusto propio, privándola de su corriente natural. Este parque representa toda esa manipulación e idealización de ella. Continúa en medio del área metropolitana, aparentando ser desprejuiciada, natural y hecha para la formación del balance que se necesita en la misma urbe.